No entendiendo de alto fútbol ni del argot de sus especialistas, la sutileza de cuyos conceptos –“intencionalidad de gol”, etcétera- es para mí hermetismo, tampoco entiendo que se pueda pasar indiferente ante las pasiones del triunfo y la derrota que sacuden los días y noches del mundial, y menos aún me es dado concebir que se pueda considerar cosa como ésta algo a) particularmente irracional, b) estúpido o c) carente de importancia. Cierto, es irracional, pero ¿particularmente? ¿Por qué estúpido? Y, desde luego, no carece de importancia. Breve e ilusoria liberación de todo, pese a que, igual que otros instantes cuya vitalidad excede la rutina, terminará con la resaca del tedioso despertar a la vida cotidiana y el regreso de sus odiosas jerarquías, brinda el pasajero soplo de aire fresco de la hermosa ilusión de que éstas no existen, o, más hermoso aún, de que es posible vivir sin ellas. Un gol de Paraguay es un gol igualmente para el panchero y el gran empresario; la victoria es la misma para todos, y a todos mueve igual expectativa. Simulacro de gran crisis histórica o lúdica parodia de un estallido revolucionario que desordena vidas y convenciones y destruye el hastiado vegetar de países enteros, personalmente me atrapa y emborracha y es más, me enciende el ánimo como lo podrían hacer el carnaval del Medievo, las Saturnales romanas, las bacanales de
martes, 29 de junio de 2010
GOOOOOOOOOOOOOL
No entendiendo de alto fútbol ni del argot de sus especialistas, la sutileza de cuyos conceptos –“intencionalidad de gol”, etcétera- es para mí hermetismo, tampoco entiendo que se pueda pasar indiferente ante las pasiones del triunfo y la derrota que sacuden los días y noches del mundial, y menos aún me es dado concebir que se pueda considerar cosa como ésta algo a) particularmente irracional, b) estúpido o c) carente de importancia. Cierto, es irracional, pero ¿particularmente? ¿Por qué estúpido? Y, desde luego, no carece de importancia. Breve e ilusoria liberación de todo, pese a que, igual que otros instantes cuya vitalidad excede la rutina, terminará con la resaca del tedioso despertar a la vida cotidiana y el regreso de sus odiosas jerarquías, brinda el pasajero soplo de aire fresco de la hermosa ilusión de que éstas no existen, o, más hermoso aún, de que es posible vivir sin ellas. Un gol de Paraguay es un gol igualmente para el panchero y el gran empresario; la victoria es la misma para todos, y a todos mueve igual expectativa. Simulacro de gran crisis histórica o lúdica parodia de un estallido revolucionario que desordena vidas y convenciones y destruye el hastiado vegetar de países enteros, personalmente me atrapa y emborracha y es más, me enciende el ánimo como lo podrían hacer el carnaval del Medievo, las Saturnales romanas, las bacanales de
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2 comentarios:
Ke lindas se les ve a las yiyis! d.d.
y así también el amore
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